Una propuesta que nace de una necesidad inconsciente pero arraigada, en la búsqueda del cambio humano hacia la felicidad que ha de pasar por una fase constructiva de elaboración, de complejización y flexibilización para después llegar a la fase de alejamiento, aceptación y atención plena, la acción que lleva a la no acción. Su resultado es la nueva obra del danzaor Jesús Carmona, de 55 minutos de duración, en la que da un paso mas hacia su verdad mas absoluta, hacia un movimiento necesariamente primario de él, con la complejidad adquirida a lo largo de los años.